En Bilbao tenemos varias cosas que no existen en ningún otro lado. Una de esas cosas es el pastel llamado Carolina.
Se dice que un pastelero bilbaino estaba cansado de que su hija pequeña estuviese metiendo siempre el dedo en los pasteles que hacía y decidió crear un pastel para ella. Como se llamaba Carolina, le puso su mismo nombre al pastel.
El postre es una tartaleta de hojaldre y por encima tiene un montón de merengue con yema de huevo por un lado y chocolate por el otro.
Es típico "pelearse" por él cuando hay pasteles de postre. Es tan rico y blandito que siempre es el primero en desaparecer de la bandeja.
Cada vez que veo una me acuerdo de mi abuelo. Le encantan. Una vez por Navidad le regalamos una de ¡¡1 kilo!! madre mía, era enorme...
Así que como este mes ha sido su cumpleaños, le he tejido una a ganchillo para regalársela. Lo único que no le ha gustado es que no le puede dar un bocado ;P
Para quien no conozca el pastel, os pongo las fotos del modelo y del resultado. ¡Buen provecho!
esta genial, seguro que tu abuelo encantado. No se puede morder pero dura más y no engorda jejeje
ResponderEliminarTe ha quedado rechulo,un detalle bonito para tu abuelo.
ResponderEliminarVeo que has regresado de las vacaciones con las pilas cargadas.
Un abrazo.
María.
Te ha quedado muy bien. Yo hace unos meses también hice una.
ResponderEliminarNo lo conocia,es parecido a uno muy popular que hay aqui en Valencia,pero es todo de merengue y se le llama asi.A mi mama le gustaba mucho.El tuyo te ha quedado precioso.
ResponderEliminar¡Ay cuándo la vea mi marido!¡Le encantan...! yo soy de Bilbao pero vivo en Las Arenas, me voy a dar una vuelta por tu blog y te invito al mío... Besos, lulú. ¿Para cuando el bollo de mantequilla, je, je...?
ResponderEliminarMuy original, se puede poner en medio de una bandeja de pasteles y a ver quien "pica".
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